Hay cosas en la vida que son más importantes que las riquezas y el oro; debes esforzarte por conservarlas, pues si tienes éstas, aunque pierdas todo lo material, podrás recuperarlo. Mas si pierdes tu buen nombre, el amor, tu familia, eso es muy difícil de recuperar.
Proverbios 15:17
Mejor es la comida de legumbres donde hay amor que de buey engordado donde hay odio.
Sustituya la palabra “buey” por su comida favorita. Lamentablemente, en una casa puede existir odio, aunque lo que debiera haber es amor. De lo que está hablando la Palabra es que son mejores aquellos momentos donde no tenemos dinero para comprar ganado engordado, pero tenemos amor; que aquellos donde el dinero te sobra para comprar cualquier tipo de comida, pero no hay amor. Es mejor recibir de la mano de tus seres queridos un plato de frijoles, tortillas, queso, a tomar un teléfono para pedir comida rápida.
Hay momentos en la vida que ganas más, consigues el trabajo que querías, el estatus económico que deseabas. No busques un estatus social, ese es el engaño más grande que existe en todas las sociedades, todo es plástico. El estatus social no va más allá de tus mejores amigos, sean pobres o ricos. Ese es tu real estatus social, la gente con quien puedes hablar y comunicarte sinceramente. Pero hay estatus sociales en los que las comunicaciones no son sinceras, sólo se habla de lo que cada quien quiere oír, no de las cosas buenas y reales de la vida. Pero cuando has tenido ese gran paso en la escala económica y logras tener más dinero del que tenía antes, si escasea el amor, todo se siente más feo. Las cosas que tienes se sienten más feas que cuando las tienes sin amor.
Por ejemplo, ¿qué pasa cuando se va la luz en tu casa y no hay Playstation, Gamecube, juegos electrónicos, televisión, equipo de sonido; lo único que te queda es un juego viejo de cartas o juegos de mesas? Todos se reúnen en un lugar y te empiezas a comunicar como hacía meses no lo hacías con tu familia. ¿Qué sientes en ese momento? Sientes cosas que hace años extrañas. O ¿qué pasa cuando ya tienes dos autos y tu esposa va en uno y tú en otro? ¿Qué pasa cuando tu hijo ya tiene su propio auto? Es mucho más práctico tener dos, pero no necesariamente mejor. ¿No se extrañan esos momentos cuando no había, sino para comprar legumbres, pero había amor? Ahora tienes para comprar todo tipo de comida, pero sientes el vacío del amor.
Hay cosas que nunca hay que perder. Si pierdes el dinero con el que compras esas cosas, jamás pierdas el amor, pues con ese amor las legumbres saben mejor. Si ya lo sabemos, ¿por qué somos tan tercos de perderlo? Dios ya te las enseñó en la vida misma. Cuando vienes aquí, Dios te está recordando lo que tú valorabas un día y lo dejaste de hacer. No hay mejor cosa para los seres humanos que aprender a vivir aquí en la tierra. No encuentro en la Biblia instrucciones para vivir bien en el cielo, sólo dice cómo hacerlo en la tierra.
Dios es Dios del cielo y de la tierra. Si El te va a bendecir en el cielo, lo hará en la tierra también. Aquí en la tierra es donde hay que aprender a vivir en amor.
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