No quiero mi propia justicia que procede de la ley, sino la que
se obtiene mediante la fe en Cristo, la justicia que
procede de Dios, basada en la fe (Filipenses 3:9).
No me importa lo mal que haya hecho las cosas el día de ayer, o cuántos errores haya cometido,
deseo que comience este día sabiendo que usted es justo. No por lo que haya hecho, sino porque lo ha recibido por fe en Jesús: la justicia de Dios.
Mire las clases de beneficios que la. Palabra de Dios dice que la justicia le proporcionará:
"Como palmeras florecen los justos" (Salmo 92: 12).
"Cuando el justo prospera, la ciudad Se alegra" (Proverbios 11: 10).
"La descendencia de los justos será librada" (Proverbios 11 :21, Versión Reina-Valera, 1960).
"Porque los ojos del Señor están sobre los justos, y sus oídos, atentos a sus oraciones" (1 Pedro 3:12).
"Porque tú, SEÑOR, bendices a los justos" (Salmo 5:12).
"Claman los justos, y Jehová oye, Y los libra de todas sus angustias" (salmo 34:17)
"Joven fui, y he envejecido, Y no he visto justo desamparado, Ni su descendencia que mendigue pan" (salmo 37:25)
No deje que el enemigo le robe ni una de estas bendiciones cuando le diga que no es merecedor de ellas. Echelo fuera. Diga en voz alta: "¡Tengo la justicia de Dios!" ¡Entonces avance en fe
y goce de los privilegios que Dios ha preparado para usted!
y goce de los privilegios que Dios ha preparado para usted!
LECTURA BIBLlCA: Romanos 3:21-28
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