viernes, diciembre 26, 2008

Has diferente estas fistas navideñas

Navidad significa nacimiento, y el símbolo de la Navidad es una estrella, una luz en la obscuridad que sirvió de guía para encontrar al salvador. No veamos más esta estrella fuera de nosotros, sino brillando en nuestro cielo interno y aceptémosla como símbolo de que ha llegado el tiempo del Cristo; el tiempo de reconocer nuestra verdadera identidad.

Dentro de cada uno de nosotros existe un Salvador que conoce nuestra totalidad, nuestra esencia. Es una sabiduría innata que, si la utilizamos como una guía, nos conducirá siempre a experiencias de paz, armonía y amor. Es algo muy especial que está en todos y es para todos. Si no sacamos el mayor provecho de ella es sólo porque no la podemos entender y mucho menos aceptar.

Esta esencia en nosotros es la que conoce nuestra totalidad o nuestra santidad.

Pero como un amigo fiel, no llegará a donde no se ha le ha invitado. Por lo tanto, vamos a comenzar nuestras fiestas navideñas abriéndole la puerta a este invitado tan especial.

No temamos abrirle la puerta y recibámosle sin expectativas. El sabrá orientarnos, sin equivocarse y nos traerá regalos que no podremos encontrar en ningún lugar del mundo.

Tan pronto recibamos ese invitado tan especial, estaremos listos para preparar la gran fiesta. Pero, ¿cómo va a ser esta fiesta de Navidad?

Nuestro amigo no pide nada. No exige sacrificios de ningún tipo. Por lo tanto, en esta Navidad, cerremos las puertas a todo sacrificio estéril, a la culpa, al miedo a la escasez y demos paso a lo único que tiene sentido en nuestras vidas, a ese regalo del cual derivan su existencia todas las cosas: el amor.

Para muchas personas, las estampas de la Navidad traen sentimientos de gozo y alegría. Para otras, esta época puede ser difícil, solitaria, aumentando los sentimientos de culpa y depresión. Continuamente leemos artículos sobre cómo disfrutar las fiestas, sin embargo muchos no podemos imaginar cómo salir de ese estado de inmensa soledad en que algunos nos sumergimos. A veces podemos sentirnos atrapados entre lo que queremos hacer y lo que debemos hacer. Nos sentimos culpables porque deseamos quedarnos en casa en vez de salir a visitar familiares por compromiso.

También podemos sentirnos perdidos porque no tenemos la familia que quisiéramos tener. Muchos de nosotros, año tras año esperamos que la mágica Navidad nos regale una persona que pueda llenar el vacío del solitario corazón, causando honda desesperación cuando no sucede. Recuerda que no estás solo(a). Que hay uno que esta a tu lado, esta a la puerta y llama esperando que le abras tu corazon.

lunes, diciembre 22, 2008

«¡Cómo quisiera... que fueras hombre!»

Cuando salió a andar en busca de agua, no estaba comprometida con nada ni con nadie. No intentaba otra cosa que encontrar agua aquella encantadora muchacha del pueblo de los nivaklé. Pero se encontró más bien con un árbol robusto, llamado Nasuk. Fue tan grande la atracción del árbol, que ella sintió que la estaba llamando. No pudo ni quiso resistirlo, sino que lo abrazó apretando el tronco con todo el cuerpo, y clavó las uñas en la corteza, hasta que sangró.

Cuando por fin lo soltó, se despidió de él, desconsolada, con estas palabras: «¡Cómo quisiera, Nasuk, que fueras hombre!»

Cuentan los indígenas de esa región que Nasuk, el guayacán, se hizo hombre y salió en busca de ella. Y no se dio por vencido hasta que la encontró, le mostró la marca de las uñas en la espalda y se tendió a su lado.1

Si hay algo que «nos suena» de esta ingeniosa leyenda de los nivaklé, no será por nada. Lo que hizo aquel guapo guayacán se asemeja bastante a lo que nos narra la historia sagrada que hizo el admirable Hijo de Dios. Ambos se encarnaron —se hicieron hombres— porque sólo así podrían identificarse con el objeto de su amor. Sólo así podrían probarle su amor y estar a su lado para siempre. Pero hay algo sumamente importante que distingue al uno del otro. El guayacán no parece haber tenido otra intención que la de pasar el resto de su vida aquí en la tierra con su amada, mientras que el Hijo de Dios vino para dar su vida por la suya aquí en la tierra, y así poder estar con ella en el cielo por toda la eternidad.

Nuestro Nasuk divino recibió el nombre de Emanuel, es decir, «Dios con nosotros», precisamente porque vino para eso: para estar con nosotros, que somos su amada. Si Jesucristo no se hubiera hecho Hijo del hombre, no habría podido cumplir su misión de buscar y salvar lo que se había perdido.2 Una vez que nos encuentra, nosotros, que estamos perdidos buscando agua que sacie nuestra sed espiritual, encontramos en Él una fuente inagotable de agua. Si bebemos de esa agua, no volvemos a tener sed jamás, sino que dentro de nosotros esa agua se convierte en un manantial del que brota vida eterna.3 Sabemos que la vida que nos ofrece es eterna porque Él no sólo sangró y murió por nosotros, sino que resucitó para estar con nosotros hasta el fin del mundo.4 Y sabemos que resucitó porque, mediante los ojos de la fe que le faltó al apóstol Tomás, podemos ver la marca de los clavos en sus manos.5 Y no podemos dejar de exclamar agradecidos: «¡Cuánto me alegro, Emanuel, que te hiciste hombre!»

viernes, diciembre 19, 2008

Vive tu vida, como un Reloj.

Trabajo más que cualquier mortal, pero más fácilmente porque lo hago segundo a segundo.

Tengo que hacer miles de tic-tacs para formar un día, pero dispongo de un segundo para hacer cada uno de ellos. No los quiero hacer todos a la vez.

Nunca me preocupo de lo que hice ayer, ni de lo que tendré que hacer mañana. Mi ocupación es de hoy... ¡aquí y ahora!

Sé que si hago lo de hoy bien, no tendré que molestarme por el pasado ni preocuparme por el futuro.

Tú, que eres persona, si quieres vivir tranquilo y tan feliz como yo, no trates de vivir toda tu vida, ni echarte todo el peso de tu trabajo en un solo día. ¡Vive ahora!

Haz el trabajo de cada día en su día. Te convencerás de que si se toma tiempo, siempre hay tiempo para todo.

Hay un modo difícil de hacer el trabajo que tiene que hacerse.

Si quieres encontrar el modo fácil... ¡mírame a mí! Nunca me preocupo, nunca me apresuro... ¡pero nunca me retraso! Lo que tengo que hacer... ¡lo hago!... ¡Ese es el secreto!

La palabra dice que por nada esteis afanosos, cada dia tiene su propio afan. Aprende a vivir el dia a dia, y te aseguro que seras muchas mas feliz de lo que puedes imaginarte.

martes, diciembre 16, 2008

Dios te da la victoria

Josué 8:1-2 nos dice: Jehová dijo a Josué: No temas ni desmayes; toma contigo toda la gente de guerra, y levántate y sube a Hai. Mira, yo he entregado en tu mano al rey de Hai, a su pueblo, a su ciudad y a su tierra. Y harás a Hai y a su rey como hiciste a Jericó y a su rey; sólo que sus despojos y sus bestias tomaréis para vosotros. Pondrás, pues, emboscadas a la ciudad detrás de ella.

Es importante que confíes en el Dios de los ejércitos. No temas ni desmayes porque Él te ayuda para que alcances tus sueños. Aunque los anhelos estén en lo alto y tengas que enfrentar enemigos, el Señor los entregará en tus manos si eres constante y luchas en su nombre.

Josué 8:15-18 continúa: Entonces Josué y todo Israel se fingieron vencidos y huyeron delante de ellos por el camino del desierto. Y todo el pueblo que estaba en Hai se juntó para seguirles; y siguieron a Josué, siendo así alejados de la ciudad. Y no quedó hombre en Hai ni en Bet-el, que no saliera tras de Israel; y por seguir a Israel dejaron la ciudad abierta. Entonces Jehová dijo a Josué: Extiende la lanza que tienes en tu mano hacia Hai, porque yo la entregaré en tu mano. Y Josué extendió hacia la ciudad la lanza que en su mano tenía.

Los adversarios saldrán huyendo al ver tu determinación. Así como orientó a Josué, te dará la estrategia correcta para que recuperes lo que el enemigo quiso robarte. Toma tu lanza y no la bajes, mientras la mantengas en alto, conquistarás lo que buscas.

Josué 8: 25-26 nos dice: Y el número de los que cayeron aquel día, hombres y mujeres, fue de doce mil, todos los de Hai. Porque Josué no retiró su mano que había extendido con la lanza, hasta que hubo destruido por completo a todos los moradores de Hai.

Dios tiene el poder para recuperar tus sueños perdidos. Quiere que despiertes y creas en Él. Si entregas tu cansancio y le adoras, Él renovará tus sueños. Les dará vida, aunque tu enemigo diga que han muerto.

viernes, diciembre 12, 2008

No te Sientas Sola, ni Desmayes

A ti mi querida amiga, que me dices que te sientes sola.....
Sola a pesar de que tienes muestras de amor al derredor de ti....

Abre los ojos!!!! Habemos gente que te amamos, posiblemente el egoismo te impida recapacitar, y crees que solamente tus cosas, tus asuntos son de sumo interés para todos, y no te das cuenta que solo tú eres la culpable de alejar a todos de ti, porque siempre estás de mal humor, porque siempre refunfuñas que hace frío, que hace calor, que llueve, que el aire, en fin.....

Tienes talentos y virtudes maravillosas!!!!! explótalas, saca lo mejor de ti, siéntete amada por ti, solo así darás el primer paso para recuperar lo que eras, que ha pasado contigo?

Porque dejas que los problemas te agobien de esta manera, vive!!!!

Piensa y escribe tus logros, por mínimos que sean, y te darás cuenta de cuantas cosas importantes haz hecho en tu vida, haz aprendido a caminar, a sonreír, a amar, cosas tan sencillas pero son tus logros finalmente, y tú, tú tienes que festejarlos....

Y estar orgullosa de ellos, no te sientas sola, si tienes a tu lado la persona que mas te ama... y no te haz dado cuenta, date cuenta de ello y verás que es mucho más fácil ver y sentir cuantos más te aman también, esa persona de quien te hablo, Jesus el Salvador y redentor!!!!!!

Amate a ti misma, como tu quieres que te amen los demás!!!!

miércoles, diciembre 10, 2008

La verdad de tu necesidad

"Cansados del camino sedientos de ti" es una pequeña estrofa del la famosa alabanza de marcos, pero es una verdad que vivimos día a día, estamos cansados, sedientos, los que conocemos de Dios, estamos sedientos de una mayor manifestación en nuestras vidas, trayendo consigo abundancia, paz y muchas cosas más.

Pera los que no conocen a Dios, saben en su interior, que necesitan algo mas, saben que están cansados y sedientos, que ya han probado muchas cosas en la vida para encontrar algo que sacie su sed, pero que desean un algo que en realidad se llama Dios.

Como dicen, por H o por R, los dos necesitan lo mismo, por que al final lo que desean es, más de lo que están viviendo y sintiendo en este momento, hay una palabra que ha trasformado la vida de muchas personas, al darse cuenta del ofrecimiento que tiene al aferrarse a ella, dice en mateo 11:28: Venid a mí todos los que estáis trabajados y cargados, y yo os haré descansar.

Somos libres, Pero esclavos de nosotros mismos, tenemos dinero, pero somos pobres, tenemos buenas camas, pero no podemos descansar en ellas, hay personas que son tan pobres que lo único que tienen es dinero.

Recuerda que si quieres mas de Dios, tienes que darte mas, por que la gran ley espiritual es que para recibir hay que primero dar, entrégate mas a Dios y encontraras el sustento y saciaras todas tus necesidades. Buscad primeramente el reino de Dios y su justicia,[ae] y todas estas cosas os serán añadidas. Mateo 6:33

martes, diciembre 09, 2008

Gozo en medio de la crisis

Te invito a ver el video antes de leer el mensaje

Si alguna noticia reciente sobre la recesión ha sacudido tu confianza, tengo una noticia de primera plana que te infundirá ánimo. Si has estado preocupado por el efecto que tendrá el estado actual de la economía en tu futuro financiero, tengo un informe fundamentado en la Biblia que puede traer tranquilidad a tu mente y librarte de toda preocupación financiera. >> ¡En el reino de Dios no hay recesión!

Fíjate bien que no he dicho que en el cielo no hay recesión. Aunque eso es cierto, las riquezas que disfrutaremos en el cielo, hoy no llenarán nuestro tanque de gasolina. Tampoco ponen comida en nuestra mesa ni un techo sobre nuestra cabeza mientras vivamos en el planeta Tierra. }

El cielo está en nuestro futuro. Sin embargo, el reino de Dios es una realidad de nuestro presente. No solamente existe en el cielo, sino también en la Tierra, donde Jesucristo es Rey. Así que, como creyentes, podemos disfrutar de los beneficios del reino de Dios y disponer de sus recursos, no solamente en el promisorio mundo futuro, sino también en este presente tan difícil.

Nosotros no tenemos que depender del sistema de un mundo caído para obtener nuestro sustento ni tenemos que sufrir los graves estragos de una economía con fuertes altibajos, con sus recesiones y sus depresiones.

Podemos vivir con abundancia en cualquier economía, porque en el reino de Dios “LA BENDICIÓN del Señor, es la que [¡siempre!] Enriquece, y no añade tristeza con ella”, Proverbios 10:22).

Alguna persona podría decirme: “Pero hermano, si eso es cierto, ¿por qué muchos de nosotros tenemos que trabajar hasta el agotamiento en dos trabajos solo para cubrir nuestras necesidades?” Porque como todo en el reino de Dios, la parte financiera de LA BENDICIÓN funciona mediante la fe, y cuando nos
estamos esforzando para suplir nuestras propias necesidades, no estamos obrando con fe. Estamos confiando en nuestro propio esfuerzo. En vez de actuar de acuerdo al reino de Dios actuamos de acuerdo al sistema de las finanzas del mundo.

En ese sistema la gente vive haciendo de sí misma su propio dios. Actúan como si fueran su propia fuente de provisión, de modo que siempre están tratando de cubrir sus necesidades. Se pasan la vida siguiendo al dinero. Jesús le llamó a eso el sistema de “mammon” (dios de las riquezas y la codicia), y de forma terminante les dijo: “Ninguno puede servir a dos señores; porque o aborrecerá al uno y amará al otro, o estimará al uno y menospreciará [le importará poco y tomará con ligereza] al otro. No podéis servir a Dios y a [mammon] las riquezas”, (Mateo 6:24).

La palabra dice que por nada estéis afanosos, cuantas veces has escuchado la gente recitar el salmo 23, es hora que tu asimiles lo que allí dice, no que lo recites, sino que lo crees y lo vivas, Dios esta con nosotros.

lunes, diciembre 08, 2008

Pequeño miembro que se jacta de grandeza

11 Hermanos, no murmuréis los unos de los otros. El que murmura del hermano y juzga a su hermano, murmura de la Ley y juzga a la Ley; pero si tú juzgas a la Ley, no eres hacedor de la Ley, sino juez. 12 Uno solo es el dador de la Ley, que puede salvar y condenar; pero tú, ¿quién eres para que juzgues a otro?

1 Hermanos míos, no os hagáis maestros[a] muchos de vosotros, sabiendo que recibiremos mayor condenación.

2 Todos ofendemos muchas veces. Si alguno no ofende de palabra, es una persona perfecta, capaz también de refrenar todo el cuerpo.

3 He aquí nosotros ponemos freno en la boca de los caballos para que nos obedezcan y dirigimos así todo su cuerpo.

4 Mirad también las naves: aunque tan grandes y llevadas de impetuosos vientos, son gobernadas con un muy pequeño timón por donde el que las gobierna quiere.

5 Así también la lengua[b] es un miembro pequeño, pero se jacta de grandes cosas. He aquí, ¡cuán grande bosque enciende un pequeño fuego!

6 Y la lengua es un fuego, un mundo de maldad. La lengua está puesta entre nuestros miembros, y contamina todo el cuerpo e inflama la rueda de la creación,[c] y ella misma es inflamada por el infierno.[d]

7 Toda naturaleza de bestias, de aves, de serpientes y de seres del mar, se doma y ha sido domada por la naturaleza humana;[e]

8 pero ningún hombre puede domar la lengua, que es un mal que no puede ser refrenado, llena de veneno mortal.[f]

9 Con ella bendecimos al Dios y Padre y con ella maldecimos a los hombres, que están hechos a la semejanza de Dios.[g]

10 De una misma boca proceden bendición y maldición. Hermanos míos, esto no debe ser así.

11 ¿Acaso alguna fuente echa por una misma abertura agua dulce y amarga?

12 Hermanos míos, ¿puede acaso la higuera producir aceitunas, o la vid higos? Del mismo modo, ninguna fuente puede dar agua salada y dulce.[h] [i]


Santiago 3 y 4

jueves, diciembre 04, 2008

La mejor creación

Para entender el verdadero alcance de la Bendición, debemos escudriñar su origen bíblico en el primer capítulo de Génesis. La Bendición aparece por primera vez en lo que considero un momento sin igual de la creación divina.

En los seis días que precedieron a la Bendición, Dios creó la Tierra por su Palabra. Él dijo: “¡Sea la luz!”, y fue la luz. A su voz de mando aparecieron en su lugar el sol, la luna, las estrellas y el mar. Las plantas, los animales y la vida marina surgieron por la Palabra de Dios.

Todo estaba preparado para la creación suprema: “Entonces dijo Dios: Hagamos al hombre a nuestra imagen, conforme a nuestra semejanza; y señoree en los peces del mar, en las aves de los cielos, en las bestias, en toda la tierra, y en todo animal
que se arrastra sobre la tierra” (Gn 1:26).

En cuanto a mí, creo que en ese momento hubo silencio en todo el universo, mientras los ángeles y las huestes celestiales miraban y esperaban la aparición de un ser
semejante a Dios que estaba a punto de ser creado. Toda su atención se centró en aquel ser llamado “hombre”, a quien se le daría autoridad sobre la Tierra. ¿Cuál sería el aspecto de tal criatura? ¿Qué clase de poder tendría? ¿Qué obra le
encomendaría Dios?

Todos esos interrogantes quedaron resueltos al instante con lo que sucedió a continuación.

Y creó Dios al hombre a su imagen, a imagen de
Dios lo creó; varón y hembra los creó. Y los bendijo
Dios, y les dijo: Fructificad y multiplicaos; llenad la
tierra, y sojuzgadla, y señoread en los peces del mar,
en las aves de los cielos, y en todas las bestias que se
mueven sobre la tierra (vv. 27–28).

miércoles, diciembre 03, 2008

Aprende a Escoger

Escoger es importante, marca tu vida y la de los tuyos. Muchos escogen el mal hábito de las drogas, se meten en serios problemas porque desperdician su vida, su dinero, su potencial e incluso se arriesgan a tener hijos enfermos. Las personas que han tenido una vida sexual ilícita, se enferman de SIDA e incluso contagian a sus hijos.

Tomar decisiones es poderoso. Si no sigues consejos, no aprendes. Las jovencitas que se aferran a un novio a pesar de lo que les digan, luego se arrepienten por haber construido una familia con problemas. Finalmente no lograron componer al novio, por el contrario, el novio las descompuso a ellas. Si eres de aquellos que se toma el tiempo de escoger lo que compra, le caes mal a quienes escogen a la carrera lo primero que encuentran, aunque no sea lo mejor.

Por ejemplo, las mujeres compran zapatos en oferta aunque no les queden. Tengan cuidado de no escoger en oferta a la pareja, porque luego lo lamentarán. Aprende a escoger con cuidado y recuerda que lo que tienes ahora es lo que escogiste antes, y no hay marcha atrás. Bien o mal, ya escogiste a tu pareja. Ahora escoge bien y decide rescatar tu matrimonio para construir una familia feliz.

Créele a Dios por un hogar restaurado, si te precipitaste a entrar en una relación, no cometas el mismo error ahora. Asume tu responsabilidad; junto a tu pareja, pide perdón al Señor por las malas decisiones y hagan el firme propósito de luchar unidos por rescatar su hogar. Sólo tienen una vida para compartirla, no la desperdicien.

En Deuteronomio 31:19-20 dice: A los cielos y a la tierra llamo por testigos hoy contra vosotros, que os he puesto delante la vida y la muerte, la bendición y la maldición; escoge, pues, la vida, para que vivas tú y tu descendencia; amando a Jehová tu Dios, atendiendo a su voz, y siguiéndole a él; porque él es vida para ti, y prolongación de tus días; a fin de que habites sobre la tierra que juró Jehová a tus padres, Abraham, Isaac y Jacob, que les había de dar.

Recuerda que tu vida y la de tus descendientes dependen de las decisiones que tomas. Si escoges trabajar mal, condenas a tu familia a vivir mal y tu jefe escogerá despedirte. Tus decisiones motivan las de otros. Provoca tu bienestar y el de tus seres queridos. Vivimos una situación económica muy difícil, sólo quienes destaquen en su trabajo lo conservarán. Los economistas pronostican desempleo masivo en los próximos años. Decide ser de los que conservarán su puesto y recibirán aumento salarial. No es tiempo de berrinches en las empresas, es tiempo de tolerancia y esfuerzos extras. No permitas que otros escojan por ti. Las bendiciones de Dios son tuyas si te decides por ellas.

martes, diciembre 02, 2008

Libere su fe

Y cuando estéis orando, perdonad, si tenéis algo contra alguno, para que también vuestro Padre que está en los cielos os perdone a vosotros vuestras ofensas.

– Marcos 11:25
Pocos personas entienden bien la relación tan estrecha que hay entre la fe y el perdón. Jesús habló de esa relación en la enseñanza sobre la fe que mueve montañas, en Marcos 11:22-26. Él dijo: "Por tanto, os digo que todo lo que pidiereis orando, creed que lo recibiréis, y os vendrá. Y cuando estéis orando, perdonad... " (versículos 24-25).

Jesús comunicó deliberadamente esos dos principios juntos. Su propósito era que entendiéramos que liberar a los que nos han agraviado es fundamental para recibir de Dios y que nuestras oraciones no serán contestadas si guardamos rencor en nuestro corazón.

El rencor paraliza la fe y lo deja a usted sin poder contra los obstáculos de la vida. Si ha estado orando por algo y parece que la respuesta no le llega, examine su corazón para ver si está guardando algún rencor. Pida al Espíritu Santo que saque a la luz cualquier rencor que esté escondido ahí. Quite de en medio lo que esté paralizando su fe y pronto verá cumplirse las cosas por las cuales ha estado orando.