UNA RELACION VERAZ

"Entonces dijeron a Moisés: Habla tú con nosotros y escucharemos; pero que no hable Dios con nosotros, no sea que muramos. (Éxodo 20:19, Versión LBLA).


Había cierta mujer que había tenido una maravillosa manifestación del Señor en su relación con EL, pero decía que tenía miedo de orar porque cada vez que oraba el Señor le mostraba algo que había en su corazón. "Temo descubrir que más hay en mi corazón, de manera que me resisto a orar" decía ella. El Señor le reveló que estaba atada por relaciones pasadas. Su padre se había divorciado de su madre cuando ella era una niña.

Después de pocos años de matrimonio, su esposo la abandonó a ella y sus hijos pequeños. Temía que el Señor también la abandonara, pero cuando comenzó a orar, desarrolló confianza e intimidad con EL. Amados, nuestro hombre natural debe ser guiado a la oración por nuestro hombre espiritual. Nuestra alma no debe dominar. Debe estar sujeta a nuestro espíritu y al Espíritu de Dios.


Cuando se trata de asuntos espirituales, el hombre natural confía más en las obras y rituales que en la relación. En el versículo con que iniciamos ellos querían un intermediario (Moisés) pero hoy podemos hacer lo mismo y esperar sólo el domingo para escudriñar su Palabra u oir su voz sólo en la Iglesia. Dios no es un Dios de citas semanales sino de relación diaria. Dios te bendiga siempre!!